Día 1
Irán al extremo oeste de la Costa Esmeralda hacia los acantilados del Cabo Frehel que se parecen a murallas. Allí visitarán con su guía privado el Fort La Latte, una fortaleza increible del siglo XIV y que. Su guía privado les enseñará todos los aspectos de la arquitectura de fortificación medieval tales como los puentes levadizos, la barbacana, el torreon, el horno de bala de cañon…todo eso en un sitio con una vista de 360 grados estupenda y muy abierta del cabo Frehel hasta Cancale.
Luego van a dirigirse al extremo opuesto de la Costa Esmeralda , hasta Cancale para compartir oystras y vino con ostricultores que les describirán su trabajo con placer y pasión.
Por la tarde visitarán con su guía privado Saint-Malo. Conocida como la ciudad Corsaria y “patria” de los mas famosos armadores y “piratas legales”, protegida por sus murallas impresionantes se encuentra tambíen en la preciosa Costa Esmeralda en el norte de Bretaña.
Paseando por las murallas se nota que la ciudad era una isla originalmente. Van a pasear con su guia privado en el laberinto de las callejuelas que tienen historias divertidas como la del “Gato Bailarin”, la del “Pelicot” una de las mas chiquititas con casas del siglo XVI y que milagrosamente no fueron destruidas durante la segunda guerra mundial. Descubriran el “cinturón” de islotes que cierra el acceso a la bahía de Saint-Malo como la Conchée, le Fort National, Harbour, le Grand Bé, le Petit Bé…con sus fuertes militares diseñados por el ingeniero Siméon Garengeau discípulo del incansable Mariscal Vauban. La marea baja les permitirá caminar hasta algunos islotes.
Desde siempre los habitantes de Saint-Malo se ligaron al mar porque su riqueza y su estatuto, hasta hoy, dependiaa de esta relación.
La ciudad se denominó asi porque proviene de Maclow, monje ermitaño que vinió de Galles en el siglo VI. Su guía privado les llevará en los pasos de Maclow para ver donde se ha instalado, en el barrio llamado Alet. Es un sitio precioso con una vista muy ancha y abierta de la boca del rio Rance y del la ciudad muy elegante Dinard.
Un sitio muy estratégico desde por lo menos los Romanos, donde se encuentran los restos de construcciones recientes como el fuerte militar del siglo XVIII que albergaba las tropas del rey Luis XV y unas baterías de cañones que hacían parte del Muro del Atlántico durante la segunda guerra mundial.
Regreso a su alojamiento.
Día 2
Hoy en camino por Dinan pararán en uno de los pueblos más bonitos en Francia : Saint-Suliac, uno de los últimos pueblos de pescadores hasta principios del siglo XX en la orilla derecha del valle de la Rance.
Dinan es una de las ciudades medievales mas impresionantes en Bretaña con un centro histórico muy bien cuidado donde podrán admirar varios ejemplos de edificios a faldes de madera fechando del siglo XV al siglo XVII.
La ciudad alta está ubicada arriba de una colina de 75 metros de altura. Del Jardín Inglès, muy cerca de la basílica Saint-Sauveur disfrutarán de una vista panorámica preciosa y tendrán una idea precisa de las mercancías y las riquezas que llegaban a la ciudad por el puerto. Dinan, en su desarrollo, es todavía un ejemplo del periodo feudal con las tres clases sociales que la componían : el Clero, la Nobilidad y el Tercer estado (los demas) y las murallas del siglo XIII significando que la ciudad era propriedad de los Duques de Bretaña.
Luego aproveharán de una cata privada de productos locales o nacionales (Cidra, Whisky Breton, Aguardiente Breton o Vino…)
Por la tarde pasarán por Dinard antiguo pueblo de pescadores convertido en el siglo XIX en un balneario muy elegante cuyos testigos son sus moradas preciosas. Para terminar este día rico pararán en el sitio de La Malouinière del Montmarin.
Se encuentra en la orilla izquierda del rio Rance en un sitio escondido y precioso. Una Malouinière cuyos propietarios eran armadores o corsarios era una morada larga en el campo o en la costa fuera del Intra Muros de Saint-Malo demasiado estrecho y donde era casi imposible mantener algunos negocios secretos.
La Malouinière del Montmarin fecha de 1760 y hay todavía gente que vive allá, por eso no está abierta a los visitantes. Sin embargo las 6 hectáreas preciosas de parque inglés y de jardín a la francesa al borde del rio se les acogen para un verdadero encanto.
Verán una maqueta muy interesante de La Malouinière del Montmarin y del astillero en el siglo XVIII que da una idea precisa de la escala del sitio.
Regreso a su alojamiento.